PROYECTO POWER (Project Power)

Pongamos en el caldero mágico llamado Netflix una pizca de aventuras adolescentes, un pelo de historias de narcotráfico sudamericano, tres gotitas de sudor de súper héroes, un pus de thriller político y aliento de Vin Diesel en Rápidos y Furiosos y ¿Qué tenemos? PROYECTO POWER.

Resulta que esta cinta dirigida por Henry Joost y Ariel Schulman es una de las cintas más vertiginosas que existen en streaming de este año, te hace sudar por lo menos la primera parte de la historia, te atrapa y te mantiene en el asiento. Los grandes efectos visuales y especiales, la música te engancha, te mantiene al filo de tu asiento o donde quiera que estés.

Pero esta película peca un poquito de ser una cinta de acción pura, un rato de diversión y adrenalina nada más, no hay construcción de personajes, no se les permite a los tres protagonistas aterrizar sus convicciones, sus errores, sus defectos, aciertos y sobre todo sus cualidades, son ahí tres compitas que por azares del destino su historias se cruzan y se ayudan, pero la razón por la cual deciden ayudarse son gratuitas, ¿así o más facilotes nuestros personajes? Es decir, no hay una disertación, una disyuntiva, una etapa de proceso de conciencia para saber qué camino elegir.

Proyecto Power es el nombre de una nueva droga sudamericana que se está probando en Nueva Orleans, una píldora que por 5 minutos despierta en el humano un don sobre natural, puede ser inmunidad a las balas, prenderse en llamas sin salir lastimado, emanar hielo de tus manos, súper fuerza, en fin cualquiera, como de un meta humano, lo curioso es que nunca se sabe qué súper poder se podría desarrollar, así como podrías adquirir un poder, como podrías explotar, porque ese es el defecto que tenía, la píldora era tan inestable que no cualquier ser humano la podría soportar y explotaba en mil pedazos, o sea pueden morir. Entonces tenemos a Robin (Dominique Fishback), una adolescente que vende la droga por necesidad ya que su madre necesita urgentemente una operación, Art (Jamie Foxx) quien está buscando desesperadamente a su hija secuestrada y Frank (Joseph Gordon-Levitt) un policía aferrado a capturar villanos cuya ola se desató también debido al alto consumo clandestino de esta droga; entonces ellos se conocen y simplemente se avientan al ruedo y ya... porque hay que vencer a los villanos y ya... vencer a los que andan drogando y matando a los ciudadanos de Estados Unidos y ya... Lo más que sabemos de ellos es eso, "su motivaciones" salvar a su familia o la ciudad, pero no por algo interior o de personalidad.

 

Mal haríamos si le exigimos más al guión de esta película cuando NUNCA nos prometieron interiorizar con los héroes de la historia, no es el MCU, no es Star Wars, no es El Señor de los Anillos o Harry Potter, donde te identificas con alguien, a tal grado que dices "quiero ser él o ella", o "me ha pasado, yo hubiera hecho esto o no"; PROYECTO POWER es una película para disfrutar, dejarse llevar por la adrenalina, las explosiones, los súper poderes, y ya... sino te sientes identificado con nadie, no pasa nada. Creo que hay películas bien hechas, bien producidas, que son disfrutables, que no pretenden buscar la identificación en el público.

Es una película donde hay un adulto traumado, hay un chavo-ruco atrapado en los 90's y la adolescente inadaptada, los exactos para abarcar un gran número grande de público, o sea Véanla y juzguen ustedes mismos, veamos ¿ustedes qué harían si tuvieran acceso a esa píldora?

PROYECTO POWER

(Project Power)

Director:  Henry Joost, Ariel Schulman

Guión:  Mattson Tomlin

Con:  Jamie Foxx, Joseph Gordon-Levitt, Dominique Fishback

Produce: Screen Arcade

Netflix

Estados Unidos, 2020

Género: acción, crimen, ciencia ficción, thriller

en inglés

113 min.